Pizarra del aula de 1 y 2 años

viernes, 14 de mayo de 2021

¡Bienvenida Primavera! - Aula de 1 y 2 años

 ¡Hola, familias!

Aunque ya han pasado unos cuantos días desde que entramos en primavera, todavía no os habíamos contado nada de lo que estamos haciendo dentro del aula y ya os adelantamos que es muuuucho. ¿Estáis preparados? ¡Pues comenzamos!

Como cada vez que cambiamos de centro de interés, lo primero que solemos hacer es ambientar nuestra clase y preparar distintos elementos decorativos para empezar a familiarizarnos con lo que vamos a trabajar. Con la llegada de la primavera llegan cambios muy visibles: días más largos, algunos muy calurosos, actividades en la naturaleza... 

Decorar el aula es una de las actividades que más les gusta a nuestros peques. Trabajan en grupo y orgullosos ven y presumen de sus grandes murales pegados por ventanas y cristaleras.


 

 

 

La clase ha quedado preciosa, pero... vais a tener que esperar todavía un poquito para ver cómo ha quedado, y es que sino... os desvelamos cuál será la temática de nuestra gran fiesta. 😊Aunque algo os hemos enseñado en las fotos ¡no os lo vais a poder imaginar!

Decorada toda la clase, nos pusimos manos a la obra con nuestro fichero. Como sabéis, en él reflejamos algunos de los aprendizajes que hacemos a lo largo de todo el centro de interés y también con los bits. De esta manera, cuando lo llevan a casa y os lo enseñan, pueden ir contándoos todo lo que saben. Y es que hay algunos peques que llevan muy en secreto las actividades de clase. Pero seguro que es para que os sorprendáis cuando los veáis por aquí y cuando lleguen sus trabajos a casa.

Estamos introduciendo nuevas técnicas de trabajo y, para ser la primera vez, nos está quedado muy bien. En una de las sesiones  hemos pintado ¡con un limpiacristales!

 

Con esta actividad repasamos todos los colores que ya nos sabemos requetebién. Uno a uno van repasando todos no sea que alguno se nos haya escapado. 


Después arrastrábamos la pintura con el limpiacristales y... ¡tachán!



Ya tenemos un súper arco iris. Algunos tuvieron que hacer una segunda pasada porque, de la emoción, dejaban de apretar y no se arrastraban los colores 😄; pero el resultado final no ha podido ser más bonito.

Con la llegada de la primavera empezamos a conocer muchas cosas curiosas sobre algunos animales. Pero, como con todo, las cosas se aprenden manipulando y observando. Aprovechando que tenemos dos cuentos en clase en los que los protagonistas son animales, concretamente la oruga, empezamos a trabajar con este curioso animal. 

Uno es "La pequeña oruga glotona", de Eric Carle de la editorial Kókinos. muy conocido por todos y donde nos cuenta como una oruga muy glotona y pequeñita va comiendo y creciendo hasta que se convierte en una mariposa. 

El otro es "María, la ciempiés" de la editorial Estudio Didáctico y cuenta con una pequeña marioneta integrada en el cuento. Este nos cuenta que María tiene que ir a una fiesta de disfraces pero no tiene disfraz. Varios animales la ayudan y la disfrazan como ellos. Sin disfraz que la convenza, se echa a dormir y a la mañana siguiente se ha convertido en mariposa, teniendo así el mejor disfraz para la fiesta. 

Todos disfrutan un montón del momento de cuento y algunos ya se saben casi de memoria sus historias. Aprovechando estos cuentos hicimos una ficha con las fases de la mariposa como podéis ver a continuación.

Esta ficha ha sido muy completa. Hemos trabajado la motricidad fina de nuestros deditos creando pequeñas bolitas de plastilina para formar los huevos que pegaríamos en una hojita. También hemos despegado y vuelto a pegar gomets (que les encantan) para crear una oruga. Con esta fase también hemos trabajado conceptos como "junto", "cerca" o "al lado" ya que los gomets debían ir pegaditos todos juntos para dar forma a la oruga.


 

 

 Para finalizar hemos hecho uso de toda nuestra fuerza para estampar preciosas mariposas.

      

¡Estas caritas no tienen precio!


 
Gracias a un "profe" del cole, tenemos en clase unos cuantos gusanos de seda. Y es que viéndolo todos los días podemos aprenderlo mucho mejor. Tuvimos la suerte de que, a los dos días de tenerlos en clase, comenzaron a fabricar la crisálida donde descansarán hasta ser mariposas. Bueno, os contaremos que estos gusanos que tenemos en el cole se convertirán en polillas.

Todas las mañanas en nuestra asamblea, aprovechando que hay que dar de comer a estos "glotones" comprobamos cuántas crisálidas hay (nos iniciamos en el conteo), si han crecido, si lo están comiendo todo... Preguntan si ya han pasado los días para ver salir a nuestra primera mariposa. Y es que la metamorfosis completa se hace de rogar.

 

 

 Mientras esperamos a que el proceso se complete, algunos valientes han querido coger a los gusanos y debéis estar muy atentos porque... cuanto más pequeños, más valientes. Pero tranquilos papás, algunos niños no han querido cogerlos y es algo que las profes respetamos, pero se asoman todas las mañanas a la caja para verlos en la distancia.


  

¡¡¡Genial!!!

  


 

Con el paso de los días, algún gusano más formó la crisálida y las primeras que tuvimos ya están casi listas para finalizar el ciclo. Mirad, mirad.
 

Aunque al cole venimos a aprender y pasarlo muy bien con las profes y los compañeros, estos días también hemos hecho algo de magia... de ahí, el título de nuestra entrada de hoy. ¿Que cómo? Pues hemos hecho nuestros propios gusanos de papel que crecen y se mueven con el agua.  Estad muy atentos al siguiente vídeo que os enseñamos los pasos a seguir por si queréis repetirlo con vuestros niños en casa. ¡Dentro vídeo!

 
Si os decidís a jugar con los gusanos de papel, aprovechad la oportunidad para hablar con los niños. Preguntadles por los gusanos, qué comen, cómo son... será una oportunidad ideal para que puedan expresar lo aprendido en clase y compartirlo con vosotros.

Además de las orugas y gusanos, hemos aprendido algunos bichitos más. Preparamos un pequeño jardín para que descansen unas preciosas mariquitas. Los más mayores, los de 2 añitos, pintaron el jardín con una nueva técnica. Ya os habíamos adelantado que estábamos introduciendo muchos procedimientos novedosos, y les están resultando muy divertidos. En esta ocasión utilizamos canicas para pintar. Sí, sí, como estáis leyendo. Pusimos en una bandeja canicas con pintura sobre el papel y para pintar agitamos muy, muy fuerte la bandeja para que se movieran se deslizaran por todo el papel. 
 

Una vez creado nuestro "césped", volvemos a poner en acción nuestros deditos para hacer bolitas de papel que serán nuestras mariquitas.


 
Los peques del Aula de 1 año no han querido quedarse atrás y es que el mundo animal ¡les encanta! También han trabajado con las mariquitas... ¡y mucho!. Rasgaron papel para pegarlo sobre un papel y simular una verde pradera de largas hierbas. Después, con la técnica de la estampación con un corcho, aparecen las mariquitas y acababan pegando unas muy pequeñitas de madera. Se lo han pasado pipa rompiendo el papel. Rasgar papel, pegar y despegar son actividades que utilizamos siempre para desarrollar la pinza psicomotriz.
 
 


Poco a poco van ganando destreza, fuerza, precisión...

 


Pero no todo van a ser bichos, también nos hemos puesto manos a la obra (o más bien manos a la tierra) para cultivar unas lechugas. El viernes se llevaron todos a casa una lechuga que ellos mismos habían plantado. Pero hubo todo un proceso antes de poder llevársela a casa.

Trajimos al Aula tierra para jugar con ella en nuestra mesa multifunciones como ya pudisteis ver en otra publicación; así que, aprovechándola, decidimos hacer un pequeño semillero. Como vais a ver, Natalia les iba contando mientras montaba el semillero y les adelantaba todo lo que pasaría con esas diminutas semillas pasados unos días.


 

 Cada mañana regábamos el semillero y observábamos atentamente si algo había cambiado. Después le trasladábamos al patio para que le diera la luz del sol. Gracias a esta pequeña actividad también hemos aprendido lo importante que es el sol para que las plantas crezcan y que, como nosotros, también necesitan agua.
 



Y, de repente, una mañana... ¡habían comenzado a salir pequeñas lechuguitas!
 

Con el pasar de los días las lechugas crecían y crecían; se les estaba quedando pequeño el recipiente donde hicimos el semillero; así que, es el momento de hacer el primer trasplante. Como otras veces, la "profe" nos muestra los pasos a seguir para que todos vieran cómo se iba a hacer.


 Tras la observación,  cada niño pudo experimentar y realizar el trasplante de una pequeña planta. 
 
 

Como veis están todos muy atentos... por eso lo hicieron tan requetebién.

  

  

Además de aprender a cuidar una planta (la necesidad de que tengan luz del sol y agua así como tierra y un recipiente adecuado), conocer sus partes (como la raíz, el tallo y las hojitas); con esta actividad están trabajando el trasvase (pasar un contenido de un recipiente a otro) con lo que reforzamos la coordinación óculo-manual y la precisión de la mano.

  

¡Qué importante es dejarles hacer!

  

Nuestros más pequeños agricultores también participaron en esta actividad. ¡Cada vez muestran mayor curiosidad y atención!

  

Ahora sí, ya tenemos todo listo para instalar las lechugas en sus nuevos recipientes, con más tierra y más espacio para crecer.



Tuvimos un fin de semana bastante más largo de lo habitual pero; tranquilas, familias, las lechugas mientras tanto estuvieron bien cuidadas Tanto fue así que cuando volvimos a clase ¡habían crecido muchísimo! Así que Asun y Natalia tuvieron que comprar nuevas macetas y más tierra para poder hacer un segundo trasplante y que cada "agricultor" pudiera llevarse a casa su propia lechuga. Y mirad qué bien plantan las lechugas y con qué cuidado. Familias, vuestros niños están pidiendo a gritos un pequeño huerto en casa. 😉
 





Lo que os decíamos... ¡¡unos expertos!!


 


Y ya el miedo a mancharse... ¡está más que superado! 😅


Como veis, tanto con los gusanos como con las lechugas, tratamos de enseñar a los niños la importancia de cuidar de los animales, por pequeños que sean, y de las plantas; además de intentar fomentar una buena dieta. Tenéis que cuidar muy, muy bien esas lechugas para que crezcan y se hagan grandes y poder hacer una rica ensalada. Seguro que más de uno os recuerda que la lechuga tiene que beber mucha agua para crecer.

 Por nuestra parte nos despedimos ya, esperando que os haya gustado la publicación de hoy... pero, no os preocupéis, que pronto volveremos con muchas más fotos y actividades del Aula de 1 y 2 años. ¡Os esperamos al otro lado!

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