Pizarra del aula de 1 y 2 años

domingo, 20 de junio de 2021

¡¡Aventura primaveral!! - Acampada en el colegio - Aula de 1 y 2 años

 ¡Hola, familias!

Segunda entrega de nuestro proyecto sobre la Primavera. ¡Nos vamos de acampada!

En la primera publicación de la primavera, os enseñamos cómo nuestros peques decoraban la clase para la nueva temática... pero sólo os mostramos el proceso; queda que veáis lo bonita que nos quedó el aula. ¿Qué os parece? 


Con la llegada del buen tiempo surgen nuevos conceptos para trabajar. Nuestro fichero de la primavera va cargado de fichas que realizamos a lo largo de los días, pero tenéis que esperar a que lleguen a casa para verlos. ¡No podemos desvelar todo! 😉

Nos hemos adentrado en el mundo de la grafomotricidad y hemos empezado a realizar pequeños trazos primaverales. Con los trabajos de grafomotricidad intentamos que los niños adquieran las habilidades necesarias para que en un futuro escriban. La grafomotricidad también nos sirve para empezar a tener un mayor control sobre el brazo, muñeca, mano o los dedos. Como en muchas otras cosas, cada niño tiene un nivel distinto de desarrollo y es muy importante respetar este ritmo y acompañarlo en todo el proceso. Aún así, nos han sorprendido y es que estos "caminitos" que han empezado a hacer, los han trabajado muy bien.

Si vuestros peques no os lo han contado, debemos deciros que sus manos tienen un dedo mágico. Sí, sí, como lo estáis leyendo. Este dedo mágico puede hacer muchas cosas; antes de hacer cualquier actividad, hacemos una primera prueba con nuestro dedito mágico. Esto les ayuda a visualizar y conocer de antemano qué es lo que van a realizar y así, cuando cojan el utensilio de escritura (en este caso el rotulador borrable), les sea más fácil.


                           Aquí nuestro dedito mágico trabajando antes de utilizar el rotulador borrable.


También hemos comenzado a trabajar los números. Algunos de nuestros peques se pasaban el día contando y hablándonos de los números, así que nos pusimos manos a la obra. Nos adaptamos a las necesidades, a los intereses y al nivel de los niños. Si muestran estar preparados para el concepto... estimulamos ese aprendizaje.

Hicimos grandes números que ellos mismos pintaron y que nos han servido para muchos juegos. Como cada uno de ellos tenía un color, buscábamos tantos objetos indicaban el número y del color del que estaba pintado. Ha sido muy divertido. Comenzamos con los tres primeros números y hemos ido ampliando. La asociación, el inicio en el conteo, el reconocimiento de la grafía del número... ¡¡se salen!!


Nuestras chicas de prácticas, Sara y Rebeca, nos prepararon un juego de números. Participaron tanto grandes como pequeños y fue muy divertido. Lo bueno de este juego es que a la vez que estamos aprendiendo los números, conocemos su forma, la cantidad que representan... estamos reciclando tapones. ¡Reutilizar materiales es importante en nuestro aula!



Hemos trabajado los números incluso cuando estamos jugando con plastilina; cualquier momento es bueno para reforzar contenidos y para aprender.

También hemos sacado nuestros puzles de madera con números que, además de servirnos para encajar y repasar colores, hemos hecho otros juegos con ellos. El juego que más les ha gustado es el que hemos llamado "detectives de números perdidos". Para esta actividad colocábamos el puzle en un sitio donde todos pudieran verlo y quitábamos uno o dos números cada vez. Ellos debían adivinar qué número era el que faltaba. ¡Y vaya vista de lince que tienen! Casi no nos daban tiempo a preguntar cuál era el que faltaba.

Como ya habéis visto, con la primavera hemos aprendido muchas, muchas cosas nuevas. Con nuestros bits de vocabulario además hemos descubierto todo lo que hay que saber para hacer una buena acampada y todas las cosas que necesitamos para ello porque nuestra actividad principal de la primavera era la "acampada en el bosque".  

Como algunos de nuestros compañeros cogían vacaciones antes de tiempo, tuvimos que adelantar el fin de la primavera y nuestra acampada para que todos disfrutaran de ella. De esta forma también podemos adelantarnos al verano y trabajar con él hasta las vacaciones, pero eso... os lo contaremos en otra publicación.

Para la acampada comenzamos preparando un espacio que se pareciera lo más posible a un bosque. Hicimos lo que pudimos y este fue el resultado. 

El fichero de los peques también lleva trabajos relacionados con la acampada y es que tratamos de relacionar todas las actividades del aula con la temática. Hicimos una hoguera con las huellas de nuestras manos y también un picnic pero... se nos llenó de hormigas. 

Los más pequeños también se van introduciendo poco a poco en las manualidades que hacemos en clase. Esta vez les tocó trabajar un poco con pintura de dedos. Preparamos las tronas para el proceso de experimentación con colores primaverales. Alguno llegó a casa más de color verde que de su color natural, pero lo disfrutaron tanto que seguro, después de ver estas fotos, nos perdonáis por todo lo que habéis tenido que lavar (sobre todo caras, cabezas y brazos, donde no llegaba nuestro equipo de protección de ropa).

Después de hacer esta ficha, nuestra intención fue hacer un picnic en el jardín del cole y hacer nuestro desayuno matutino en el jardín todos juntos. Pero hubo unos cuantos días que llovió un poquito y no hacía demasiado sol, así que el jardín se mantenía húmedo y no fue posible. Como no queríamos dejar a los peques sin su picnic y aquí siempre tenemos alternativas, al no poder hacerlo al aire libre... pues lo hicimos en el aula.


 
Durante el tiempo que estuvimos en nuestra simulación de acampada, los peques se han portado muy bien y sus desayunos eran vistos y no vistos.
 
Acabado el almuerzo, tocaba explorar el entorno. Retomamos una vieja actividad que conocisteis con los esquimales: "la pesca". Fue todo un éxito y no podía faltar en nuestra acampada. De esta manera, nuestros aventureros pudieron aprender un nuevo sitio donde practicar pesca, el río.
 







 
Como en las buenas acampadas nocturnas, nos sentamos alrededor de la hoguera a contar historias y quemar nubes de azúcar. 
 

 
 Como ya estáis viendo, lo que más ha gustado de la acampada junto al picnic ha sido la pesca. Esta vez nuestros excursionistas se han hecho todos unos expertos en el arte de pescar. Con este juego además de garantizar la diversión, fomentamos la coordinación viso-motriz ya que necesitan mucha precisión en sus movimientos para pescar los peces. Y menos mal que teníamos repuesto pues nos dejaron enseguida el río sin ellos. El juego de pesca también fortalece la musculatura de hombros, brazos y manos tan necesaria para la futura escritura. ¿Será por esto que les salían tan bien los trazos de grafomotricidad? ¡Si es que son unos campeones! 








  Los niños del Aula de 1 año también quisieron probar suerte pescando. ¡Y también se les dio fenomenal!






Los más chiquitines del grupo ya se están haciendo a la dinámica de trabajo del aula y se están convirtiendo en todos unos exploradores. Esta actividad temática ha sido la mejor manera de permitirles explorar libremente el entorno que les ofrecemos. Han disfrutado un montón con la experiencia y al igual que sus compañeros más mayores, están pidiendo a gritos una excursión al monte con merienda incluida.





 Como habéis podido ver, a estos pequeños exploradores lo que más les llamó la atención fueron las piedras de nuestra hoguera. Estuvimos recopilándolas por toda la clase cuando nos tocó recoger, pero mereció la pena.

Pero esto no fue todo lo que nos estaba esperando. Una buena acampada debe ser aquella en la que la oscuridad de la noche nos permite hacer juegos con las linternas. Como nuestra acampada fue una mañana de cole y el sol brillaba, tuvimos que bajar las persianas un poquito para conseguir algo de oscuridad y hacer juegos con la linterna. Descubrieron que si acercas la luz a un punto (en este caso de la tienda de campaña), esta se hace pequeñita y que si la alejas, la luz se hace más y más grande.






Y hasta aquí, toda nuestra aventura primaveral en el bosque. El desarrollo de la acampada ha sido tan bueno que todos consiguieron las medallas de la acampada y también sus carnet de "camperos". Estaban tan contentos por ello que nos ha sido muy complicado sacarnos una foto donde se nos vea bien a todos. Ya lo sentimos, familias, la ilusión y la alegría les ha podido esta vez.

Con todo lo que han aprendido estos niños, solos os queda preparar una buena merienda y buscar un buen sitio para salir un día a comer o merendar.  ¡Ya tenéis plan para el fin de semana!

En breve, volveremos por aquí con una aventura de lo más tropical. 

¡Hasta pronto, familias!

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